Desde hace muchos años, es más que reconocida la amistad que existe entre el San Pablo y Chacarita. Y esta fraternidad entre hinchadas se vio reflejada de una manera llamativa, ya que un equipo de las afueras de la región, más precisamente en Itaquera, juega con la remera clásica del Funebrero.
Además de esa hermandad, esta curiosa circunstancia se explica en que dos socios de Chacarita que viven en San Pablo, forman parte de un grupo de voluntarios que trabajan en el lugar con alrededor de 70 niños y adolescentes, de los cuales algunos son angoleños y bolivianos. Por otra parte, además de la disciplina principal, fútbol, se realizan otros deportes como el Skate, Handball, Futsal y Tenis.
En ese contexto, y en sociedad con el Instituto RUA, se decidió la creación de un club que llevara el nombre de Chacarita Juniors – San Pablo.
En definitiva, este es un ejemplo más, de aquello que se llama la “diplomacia de los pueblos”, y de como el fútbol trasciende fronteras y que cuenta con un profundo sentido social.
