El domingo amaneció con una postal casi primaveral en la región del AMBA. La jornada se presenta con bancos de niebla matinales, especialmente densos en zonas suburbanas, que tenderán a disiparse lentamente hacia el mediodía. A medida que avance el día, el cielo se irá abriendo con momentos soleados y temperaturas agradables, que rondarán los 18 a 20 grados, bajo condiciones de estabilidad y vientos suaves del noreste.
Este aire templado y húmedo se ha instalado en la zona desde hace algunos días, generando temperaturas mínimas y máximas entre 3 y 4 grados por encima de lo habitual para esta época del año. La situación continuará durante el lunes 14, con otro amanecer húmedo, presencia de neblinas y una tarde parcialmente nublada y cálida, con máximas previstas en torno a los 18 grados.
Para el martes 15, se espera una jornada inestable. Durante el día comenzarán a desarrollarse lluvias y tormentas sobre sectores del centro y sur de la provincia de Buenos Aires, y hacia la noche se prevé que el frente avance sobre el AMBA. El Servicio Meteorológico Nacional emitió una alerta amarilla por tormentas fuertes para esa noche, con precipitaciones que podrían acumular entre 20 y 50 milímetros, acompañadas por ráfagas de viento y ocasional actividad eléctrica.
La madrugada del miércoles 16 será el punto más crítico, con tormentas de variada intensidad y un cambio brusco de viento al sur, que traerá aparejado un marcado descenso térmico. Las precipitaciones podrían extenderse durante la mañana y parte de la tarde, pero se prevé una mejora hacia la noche.
A partir del jueves 17 y durante el resto de la semana, se espera el regreso de condiciones estables y soleadas. Si bien las temperaturas mínimas serán bajas —especialmente el jueves y viernes, con marcas entre 6 y 9 grados—, las máximas volverán a subir de forma paulatina y alcanzarán los 18 grados el próximo fin de semana, apuntando a una nueva racha templada para julio.