La historia de Khea: de Virreyes a ser uno de los máximos referentes del trap

Se crio en esa localidad de San Fernando y pegó el salto a la fama, a tal punto de compartir una increíble experiencia con Bad Bunny, a través del hit “Loca”, la canción más escuchada en todo el mundo durante 2018.

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Él mismo reconoce que nació en un barrio muy humilde, de laburantes, donde el hambre para muchos se hace notar, donde el calor de enero se sufre ante la falta de un aire acondicionado, y donde el frío de julio golpea y achicharra a gran parte de la población que no posee los recursos para acceder a una estufa. Khea no está ajeno a ello y si lee estas palabras comprenderá muy bien de qué se trata. Viene de Virreyes, partido de San Fernando. Allí se crió e inició su camino al éxito, marcado por su don en el género del trap.

Hasta el 2017, el trap nacional estaba lejísimos de convertirse en lo que es actualmente. Este movimiento que ya alcanzó a mover masas y que, sobre todo, se refleja de una manera muy particular en los jóvenes, fue creciendo de la mano de algunos artistas que, como si fuese un hobbie más, empezaron haciendo freestyle en las plazas cercanas a sus casas.

Nacido el 13 de abril del 2000, Ivo Alfredo Thomas Serue, conocido como Khea, era uno de ellos. Aunque a diferencia de otros, el sendero que transitó por esa rama perduró poquito, porque para agosto de ese año hizo su debut en la música con “B.U.H.O.”, un track infeccioso en el que compartió mic con Duki, Arse, Midel y Klave.

Generalmente cuando una persona se lanza en algo, más allá de lo que se dedique o emprenda, tarda un determinado tiempo en conocer el éxito, o la fama en este caso. Pero en el caso de Khea sólo unos meses después el artista lanzó "Loca”, el hit que sacó con la colaboración de Duki y de Cazzu, y que en 2018 fue la canción más escuchada de todo el mundo. No sólo de Argentina, de todo el mundo. Sí, el pibe de Virreyes logró eso. Ni hablar cuando, al tiempo, el que se acopló al tema fue Bad Bunny, el “rey” del género, con el cual realizaron un remix que hasta hoy sigue acumulando escuchas y resonando en cada rincón de América Latina.

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Foto: Khea (der.) junto a Bad Bunny (izq.)

Son varios los artistas o las bandas a las que, después de posicionarse al frente de una canción que rompe con todos los esquemas y se mete de lleno en el público consumidor, les cuesta sacar un segundo hit que también la descosa. Para Khea no fue así, porque incluso después de “Loca” apareció un tercer corte, “She Don't Give a Fo”, también junto a Duki, con quien hace una dupla difícil de equiparar.

Su salto al restó del mundo, en ese marco, llegó como se esperaba. En 2019, ya con varios hits a sus espaldas, como por ejemplo “Como le digo”, realizó su tour “Vida Young Flex” por Uruguay, Bélgica, Alemania y España. Seguidamente, brindó un show en Tomorrowland, transformándose así en el primer argentino en hacerlo.

En 2020 se ubicó como el argentino más escuchado en Spotify y, más en la actualidad, en febrero del corriente año, el sanfernandino fue uno de los grandes ganadores en los Premios Lo Nuestro: recibió una estatuilla por el “Remix del año”, su hit “Ayer me llamó mi ex” junto a Prince Royce y Natti Natasha, ft. Lenny Santos.

Salió de abajo y conoció el barrio. Y entre 'barrio' y 'barro' hay solo una letra de diferencia. Porque allí se metió también. Se “enchastró” y hoy, con apenas 22 años cumplidos hace unos meses, es uno de los máximos exponentes del trap. Podrán variar sus álbumes, quizás en un futuro su estilo de música y también su número de seguidores o fanáticos. Lo que cambiará nunca es su origen: es de Virreyes.

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