El presbítero Raúl Pizarro asumió en las últimas horas como nuevo titular de Ausana y obispo auxiliar de la diócesis de San Isidro. La ordenación, que fue designada por el Papa Francisco, se llevó adelante en el Colegio Carmen Arriola de Marín y fue presidida por el presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, Monseñor Ojea.
La diócesis de San Isidro comprende, además, los partidos de Tigre, San Fernando, Vicente López y las secciones 1, 2 y 3 del Delta bonaerense. Se divide en 67 parroquias y alcanza una población total de 1,253,170 habitantes, de los cuales 1,190,250 son católicos.
Nacido el 12 de marzo de 1973, Pizarro se desempeñó como vicario parroquial de las iglesias: Nuestra Señora del Carmen, de San Fernando (1998-1999); de Santa Rita, en Boulogne Sur Mer (1999-2001); de San Pablo y de Nuestra Señora de Itatí, de Virreyes (2001-2004); y de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, en Rincón de Milberg (2005-2008).
"Es una emoción demasiado grande la que estoy sintiendo. La expectativa es soñar con una Iglesia misionera y samaritana. Tenemos que continuar unidos para que podamos salir todos y todas adelante lo más pronto posible", remarcó el protagonista de la ceremonia, Pizarro.
Invitados por el Obispado de San Isidro, el intendente Gustavo Posse y diferentes autoridades del Municipio de Tigre, fueron quienes presenciaron esta asunción de Pizarro como nuevo titular de Ausana y obispo auxiliar de la diócesis.
"Estamos en representación del Municipio de Tigre para acompañar a toda la comunidad católica en este acto tan importante. Continuaremos trabajando en conjunto con la Iglesia, como así también con los actores sociales en este contexto sanitario que nos convoca a articular acciones para salir adelante. Este es el camino y la permanente impronta de la gestión de nuestro intendente Julio Zamora", señaló el secretario de Desarrollo Económico y Relaciones con la Comunidad, Emiliano Mansilla, finalizada la ceremonia.
Por su parte, quien llevó a cabo la ceremonia, Monseñor Ojea, expresó: "Estoy muy contento porque el santo Padre ha tenido la delicadeza de mirar las necesidades de la diócesis. Hemos podido encomendar esta enorme tarea a Raúl, que sin dudas será uno más del equipo que colaborará en seguir transitando el camino de la fe y la esperanza".