La menstruación es aún en nuestros tiempos un tabú, algo de lo que casi nadie habla ni se ocupa. Se esconde, incomoda, nos da vergüenza preguntar sobre el tema y pedir ayuda. ¿Por qué una cuestión de salud pública genera esto? Es de suma importancia que toda aquella persona menstruante tenga la posibilidad de acceder a los productos de higiene y toda la información que necesite, sin importar edades, clases sociales o espacio geográfico. Sin embargo, pocas veces sucede.
El programa Menstruar, que se lanzó en el municipio de Morón en octubre de 2020 y fue presentado por el intendente Lucas Ghi, es pionero en la Provincia, está pensado en el marco del programa de Salud Sexual Integral y busca brindarle a la comunidad información sanitaria y garantizar, de manera paulatina, el acceso equitativo a productos de cuidado para la menstruación.
La iniciativa surgió a partir de la ordenanza impulsada por la concejal Sandra Yametti, del partido GEN, para el “Derecho al acceso igualitario de la gestión menstrual”, y fue ampliada a través de la Secretaría de Mujeres, Géneros, Diversidad y DDHH. De esta manera, el Municipio es el primero en la Provincia y uno de los tres en el país, junto a las ciudades de Santa Fe y San Rafael (Mendoza).
En la zona norte del conurbano, más precisamente en los municipios de San Isidro y San Fernando, desde distintos movimientos de mujeres se han presentado proyectos para solicitar a los gobiernos locales la implementación de medidas similares, pero aún se encuentran en espacios de trabajo legislativo.
La Dirección de Géneros y Equidad del Municipio de Morón realizó un sondeo con el que pudieron determinar que el costo de 24 toallitas higiénicas al mes varía entre $160 y $350, lo que genera un gasto anual de entre $1920 y $4200 por persona.
Además, según informaron desde el distrito, hoy en día el 58,3% de los hogares cuenta con, al menos, un cuerpo menstruante de entre 13 y 50 años. Allí las toallas higiénicas son de primera necesidad y a la vez un costo fijo no siempre fácil de mantener.
En este sentido, Cinthia Frías, secretaria de Mujeres, Géneros, Diversidad y Derechos Humanos del Municipio de Morón aseguró que "durante la pandemia se notó mucho más la desigualdad en algunos sectores, por eso fue importante para nosotras empezar a distribuir rápidamente estos productos de gestión menstrual que sabíamos que era una necesidad concreta de la población”.
En los Centros de Atención Primaria de la Salud (CAPS), las Casas de la Juventud y el Centro Municipal “Vivir sin Violencia” del distrito de Morón se encuentran disponibles las toallas descartables para que toda persona que las necesite pueda retirarlas una vez al mes. “Con los productos de cuidado también les ofrecemos folletería sobre el tema e incorporamos allí la difusión de la línea de salud sexual que tiene el municipio para cualquier duda que se tenga”, contó la secretaria.
Tampoco se puede negar el derecho a la información: se deben visibilizar y promover nuevas formas de vincularnos como sociedad con la menstruación, que ya no se esconda, que nos animemos a consultar las dudas, nada nos tome por sorpresa y, al contrario, estemos atentos y entendamos nuestro cuerpo.
Para esto, el programa contempla distintas campañas educativas y comunicacionales sobre la salud menstrual, que se llevan adelante con la intención de concientizar a la comunidad, visibilizando las ventajas y desventajas acerca de estos productos, y así promover alternativas más saludables, económicas y sustentables.
“Estamos en una etapa inicial, la idea para más adelante son instancias de talleres y de trabajo con la población. Además, poder sumar copas menstruales y toallas de tela reutilizables para tener en cuenta un eje tan importante como es el cuidado del ambiente”, concluyó Frías.