Tigre no tuvo una buena noche en el Estadio Libertadores de América pero rescató un empate frente a Independiente por la fecha 9 de la Copa de la Liga. Fue 1 a 1 con goles de Leandro Benegas y Mateo Retegui, ambos de penal.
El arranque del partido se presentó con mucha disciplina y rigidez por parte de los dos equipos. De hecho, esta tendencia se mantuvo hasta los 30 minutos. Tigre estuvo ordenado en el fondo y su principal arma de ataque fueron los cambios de frente de Blondel desde la derecha para algún delantero que tirara una diagonal.
Pero eso también le terminó jugando en contra por dos cosas: porque le faltó sorpresa en el mediocampo y no tuvo otra herramienta para lastimar y porque el Rojo desbordó mucho más por izquierda, aprovechando las subidas de Blondel más allá de mitad de cancha y es ahí donde generó el mayor peligro. Durante un largo rato el trámite se hizo muy trabado y se rompió a los 35' con el gol de Independiente.
Roa desbordó por izquierda, tiró el centro y la pelota le dio en la mano a Cabrera, que estaba ampliando volumen pero quedó la duda por la distancia entre el lanzador y la mano. Mastrángelo cobró penal, el VAR lo convalidó y Leandro Benegas lo cambió por gol pateando cruzado. A partir del 0-1, el partido se hizo mucho más dinámico y movido, Tigre salió a buscarlo (tuvo un cabezazo de Cabrera que se fue cerca) pero no pudieron influir ni Castro ni Zabala, el Rojo fue el que terminó imponiendo las condiciones y se fue al descanso con ventaja.
Para el complemento, el Matador se adelantó unos metros en el campo pero le siguieron faltando ideas para generar algún ataque prometedor. No hubo claridad en la salida desde el fondo como en los últimos partidos (Demartini muy errático) y a Magnín y Protti les quedaba muy lejos el arco las pocas veces que recibían. A los 16', Martínez mandó a la cancha a Menossi y a Colidio en lugar de Equi Fernández y Castro, ambos de flojo nivel y un rato después a Retegui y Obando (por Protti y Zabala), buscando respuestas en ofensiva.
El partido fue intenso durante todo el segundo tiempo e Independiente nunca se relajó, porque a los 26' casi marca el segundo después de una corrida de Blanco a espaldas de Prieto que terminó en un centro para Benegas, pero por suerte el delantero le pifió al arco. A los 31', Obando tuvo una chance clara con un zurdazo que tapó Sosa y unos minutos después se instaló la polémica: lo bajaron a Retegui cuando estaba pivoteando, pareció penal pero Mastrángelo no cobró y el VAR tampoco lo llamó a revisarla.
El ingresó de Menossi no salió para nada bien. El 10, que saltó a la cancha para hacerse cargo del equipo, erró demasiados pases y terminó contagiando al equipo. Aún sin demasiadas ideas, Tigre intentó buscar el empate con el empuje y aprovechando que Independiente retrocedió muchos metros, pero no pudo. Se aproximó varias veces, buscó mucho a Retegui pero al igual que durante todo el encuentro, le faltó lucidez en los metros finales.
Aunque en el fútbol nunca está todo dicho. Cuando parecía que el partido se moría, una mano de Barreto en el área en el último minuto hizo que Mastrángelo sea llamado por el VAR. El árbitro cobró penal, Retegui se hizo cargo y lo pateó con categoría para decretar el empate cuando parecía que Tigre se iba sin nada.
Con este resultado, los dirigidos por Martínez quedaron en el primer puesto en soledad con 16 unidades, aunque podrían ser superados si Boca y Estudiantes ganan sus respectivos partidos. La próxima fecha será contra Huracán en condición de local.