Tigre perdió ante Barracas Central en un partido donde a los dirigidos por Juan Manuel Sara les faltó ideas para perforar la defensa del Guapo. Tuvo algunas claras, pero fue poco contundente. Encima en la última del partido se quedó con las manos vacías.
Con varios cambios en el once sabiendo que el jueves es la revancha de los playoffs de la Sudamericana, Tigre sabía que tenía que sumar de a tres ante Barracas, un posible rival directo en el próximo campeonato.
Después de veinte minutos soporíferos, el Matador se despertó y empezó a incomodar a un Barracas que paró una férrea línea de cinco para defenderse a toda costa. Poco de Aaron Molinas y Alexis Castro en zona de gestación y buenas combinaciones de Mateo Retegui con Ezequiel Forclaz, pero sin chances claras de gol.
Fue un primer tiempo muy físico, de mucha posesión para los de Victoria pero poca resolución en 3/4 del campo de juego. La única clara del Matador fue en los pies de Retegui: el arquero Desábato la dejó corta en salida, Mateo le dio de zurda y pasó rozando el palo izquierdo.
El Matador salió con todo al segundo tiempo y empezó a hacer méritos para estar arriba en el marcador. Cabezazo de Alexis Castro en el palo y un mano a mano de Molinas despilfarrado. Tigre ya llegaba con más facilidad, pero a los 20' del ST seguía cero a cero.
Se consumían los minutos y Tigre no podía vulnerar a Barracas. Cierto nerviosismo se apoderó del equipo y faltaban siempre cinco para el peso en cada ataque, por eso la gente se impacientaba. Obando y Zabala a la cancha a los 33' por Flores (gran partido) y Molinas.
Barracas logró salir del fondo y sacó el partido adelante. Los cambios nuevamente no le aportaron soluciones a Tigre y se quedó sin nafta arriba para lastimar en los últimos minutos.
El Matador recibirá este jueves a Libertad buscando los octavos de Copa Sudamericana.