Este miércoles, la cadena de electrodomésticos Garbarino, que la semana pasada despidió a 1.800 empleados, presentó el concurso preventivo de quiebra ante la Justicia.
Según explicaron, la razón sería una deuda superior a los $10.000 millones a causa de una caída del consumo durante los últimos años que se habría aumentado durante la pandemia.
Uno de los locales afectados fue el que se encuentra en Portal Escobar que ya cerró completamente sus puertas y tras dejar sin trabajo a sus empleados estos salieron a reclamar una solución por parte de la cadena.
Tras conocerse sobre los despidos a los trabajadores pertenecientes a 105 locales ubicados a lo largo del país, el ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria por 15 días en un intento por frenar las cesantías.
En la disposición la cartera laboral instó a las partes a retrotraer la situación actual. Por un lado, llamó a la Federación Argentina de Empleados de Comercio y Servicios a dejar de lado "toda medida de acción directa que estuviesen implementando y/o tuvieran previsto implementar".
Por el otro, pidió a la empresa Garbarino S.A. que "en caso de haber efectuado los despidos denunciados, retrotraer la situación a la existente con anterioridad al inicio del conflicto". Sin embargo, la cadena presentó la quiebra y la causa ya fue radicada en el Juzgado N°14.
El grupo Garbarino, que se encuentra conformado por las empresas Garbarino, Compumundo, Digital Fueguina, Tecnosur, Garbarino Viajes y Fiden, fue comprada hace dos años por el empresario Carlos Rosales, dueño de la aseguradora Prof y pro tesorero del club San Lorenzo.