A falta de tres fechas para que termine el torneo, Tigre, que ya está clasificado a la Liguilla Pre-Sudamericana, también tiene opciones de meterse en la de la Libertadores. Pero, ¿cómo se juega?
Por: Darío Guadalupe
El principal objetivo del año está llegando a su definición. Meterse en la Liguilla Pre-Libertadores es cada vez más difícil, pero aún hay chances para ilusionarse. Sea cual sea la Liguilla, hay que tener en claro cómo es el modo de disputa y cuáles son las probabilidades de que el Matador acceda a alguno de los dos certámenes internacionales.
La Liguilla Pre-Libertadores es la más sencilla: clasifican del tercero al sexto de la tabla y juegan a único partido en cancha del mejor ubicado con los cruces tercero versus sexto, y cuarto versus quinto. Los ganadores de ambos cruces disputarán en partidos de ida y vuelta el pasaje al máximo torneo continental. El perdedor de esa “final” jugará la Sudamericana.
Por el lado de la Liguilla Pre-Sudamericana, clasifican del séptimo al decimoctavo con el mismo sistema de cruces que en la otra liguilla. Se enfrentarán en eliminación directa y los seis ganadores pasarán a la segunda ronda en la que se suman los perdedores de la primera fase de la Liguilla Pre-Libertadores. Se ordenarán por cómo se ubicaron en la fase regular y se vuelven a dividir en cruces de eliminación en partidos de ida y vuelta. Los cuatro ganadores, clasifican a la Sudamericana.
Por el momento, Tigre está en el décimo puesto a cuatro puntos de los puestos de Liguilla Pre-Libertadores en la que, en caso de clasificar, probablemente enfrente a Rosario Central o Racing. En caso de no acceder, el conjunto de Alfaro se mete en la Liguilla Pre-Sudamericana, en la que por ahora, enfrentaría a Newell’s.
