El entubamiento y saneamiento de la cuenca del arroyo Bedoya, en la localidad de Garín, continúa su curso. Semanas atrás dio inicio y ahora empezaron los trabajos preliminares para la colocación del encofrado, dando respuesta a un reclamo histórico de los vecinos de esa zona, que vieron paralizarse la ejecución de los trabajos entre 2010 y 2012.
La obra tiene como principal objetivo reforzar el sistema hidráulico de la localidad y mitigar los problemas de inundaciones en la zona. Los trabajos se ejecutan a partir de un convenio llevado a cabo entre el intendente en uso de licencia y secretario de Economía del Conocimiento de la Nación, Ariel Sujarchuk, y la Secretaría de Infraestructura y Política Hídrica del Ministerio de Obras Públicas de la Nación.
Antes de comenzar el histórico saneamiento del arroyo Bedoya, existían previamente dos obras sobre la traza que se iniciaron bajo la gestión anterior. Una aguas arriba que corresponde al tramo que se realizó entre 2010 y 2011 y que debe terminar en el Hospital del Bicentenario, de los cuales se hicieron 330 metros de los 370 totales.
El segundo tramo, ejecutado sobre Vicente López, a la altura de avenida Fructuoso Díaz, se construyó durante 2011 y 2012. Según explicaron desde la comuna, esas tareas estuvieron mal realizadas. "Hubo diversas irregularidades, con dimensiones menores a las proyectadas, fuera de cota, y a cielo abierto, la cual nunca funcionó y genero más problemas que beneficios", indicaron.
El trabajo que se lleva adelante actualmente, en respuesta a los frecuentes pedidos de los vecinos, contempla la demolición del tramo deficiente y, finalmente, la ejecución con las dimensiones y la profundidad adecuadas.
Una vez finalizados ambos tramos, se empalmarán en la avenida Fructuoso Díaz. Horas atrás, se comenzó a trabajar en las tareas preliminares para la colocación del encofrado metálico móvil y de la armadura, que servirá para su posterior hormigonado. "Se trata de un trabajo que será de gran utilidad para la conectividad entre los barrios aledaños", explicaron fuentes del área de obras municipal.
Las tareas de saneamiento implican una inversión total de más de $1.300 millones y comprenden el entubamiento de 1.500 metros del arroyo a través de grandes conductos de hormigón armado, conformados por 400 metros de un canal rectangular a cielo abierto y 1.100 metros de un conducto rectangular cerrado.
Por allí se canalizarán los grandes caudales de agua de lluvia de la cuenca, que abarca parte de los municipios de Escobar, Malvinas Argentinas y Pilar. El saneamiento y entubamiento del arroyo Bedoya tiene un plazo de ejecución de 18 meses dividido en cinco etapas.