En San Isidro, el Municipio continúa con intención de recuperar y renovar espacios públicos junto a la costa. Luego de la decisión para que no se realice un barrio privado en la costa de Martínez, donde se ubicaba el bar Malloy's, y de las obras en el paseo de los 33 Orientales, en Beccar, la administración de Ramón Lanús llevó adelante la demolición de un reconocido bar ubicado en el bajo de San Isidro para ampliar en ese sector el acceso público costero.
El bar en cuestión se trata de Catalejo, que se encontraba en Roque Sáenz Peña 1601. Si bien el cierre había sido comunicado por el mismo local a principios de mayo de este año, por ese entonces no se habían conocido los motivos de la medida. En sus redes sociales, desde el establecimiento habían sostenido que el lugar "cerró sus puertas después de más de 20 años, por disposición de la Municipalidad de SI".
El local ocupaba una superficie de más de 1.000 metros cuadrados. "Su cierre definitivo se produjo tras la revocación del permiso precario y gratuito con el que funcionaba desde hace más de dos décadas", explicaron desde la comuna y adelantaron que el terreno será parquizado e integrado al nuevo esquema costero: se sumarán juegos para chicos y senderos en la zona.
Además, se anunció que el local lindero, Barisidro (Roque Sáenz Peña 1602), otro clásico bar del distrito, será desalojado en julio. El permiso de uso precario con el que operaba también fue revocado. En las próximas semanas se realizará una constatación del estado del inmueble y el inventario de bienes, paso previo a su recuperación efectiva por parte de la comuna.
El Municipio indicó que ambos establecimientos ocupaban terrenos públicos sin contraprestación económica. Según destacaron desde la gestión local, estas situaciones se remontan a concesiones otorgadas hace casi 30 años, que exceden el período máximo establecido por la normativa vigente.
Las acciones se enmarcan en un plan que busca revalorizar el borde costero mediante la reorganización de usos, la consolidación de un corredor continuo y la garantía del libre acceso. En este marco, se planean recuperar ocho hectáreas de terrenos ribereños que hoy están ocupados o restringidos, de acuerdo a lo que destacó el intendente Ramón Lanús.
"Queremos una costa integrada y accesible, con espacios públicos para que todos los vecinos de San Isidro, y quienes nos visitan, puedan disfrutarla", sostuvo el intendente Ramon Lanús. "Hoy en San Isidro, si no sos socio de un club, no tenés bajada pública a la costa. Nosotros vinimos a cambiar eso. En total vamos a recuperar 8 hectáreas de costa que hoy están ocupadas o cuyo acceso es restringido, para ponerlas en valor y generar un paseo costero", agregó.
El municipio ya había dado su primer paso para revitalizar el frente costero al revocar la autorización para el barrio cerrado frente al río, ubicado en el bajo de Martínez, en la calle Alvear. Además, realizó obras en el paseo de los 33 Orientales, en el límite del partido con San Fernando, incluyendo zonas recreativas, áreas de esparcimiento y la valorización del monumento en el lugar.
"Venimos de años y años de permisos precarios y manejos informales, donde se desdibujó el límite de lo privado y lo público, y se perdió una visión de largo plazo para integrar nuestra ciudad con el Río de la Plata", sostienen desde el municipio San Isidro. Y concluyen: "Este es un paso más para recuperar espacio público para todos los vecinos de San Isidro e impulsar el trabajo, el desarrollo económico y la seguridad de la zona".