Chacarita desaprobó nuevamente y esta vez cayó derrotado en su estadio frente a Quilmes por 3 a 1. El Tricolor hace 11 encuentros no conoce un triunfo. Su próximo rival será nada más ni nada menos que Tigre.
El desarrollo de la primera etapa sucedió de manera similar a lo visto por el equipo en los primeros partidos de la "era Arias"; con la intención de ser protagonista, pero con la falta de intérpretes para desplegar la idea. Quilmes, por su parte, complicaba con la velocidad de Blanco y con alguna (aislada) pelota aérea, frenada siempre por Tripodi.
Los primeros 45 minutos no dejaron casi situaciones netas de gol, pero sí ciertas aproximaciones como la de los 15', devenida de un pase de Tallarico a Nieto, quien corrió por la banda izquierda y sacó un centro que nadie llegó a conectar.
En la réplica, el chico González (hizo su estreno en el once titular) se asoció con Nieto, quien en la puerta del área grande remató y Saracho contuvo el balón sin inconvenientes.
La única llegada neta para los comandados por Sava ocurrió a los 24 minutos, luego de un pase largo con destino al "10", Machado, que corrió por todo el andarivel derecho y ante la salida de Tripodi sacó un disparo que desde el piso Piñeyro desvió y mandó al tiro de esquina.
El inicio del complemento lo tuvo al equipo de Arias cerca de lograr la igualdad: Vega, desde el costado derecho de la cancha, enganchó y sacó un centro que encontró bien posicionado a Nieto, quien hizo una pausa y remató débil para que Saracho la contenga.
El Funebrero siguió intentando pero chocándose con su ineficacia en los metros finales, y Quilmes lo aprovechó. Vía penal, por un agarrón de Ibáñez a Pavone, Anselmo puso el 1 a 0.
Sintió el gol el Tricolor, más aún cuando el inexorable Pavone, sólo dos minutos más tarde, decretó el 2 a 0 con un disparo que dejó sin chances a Tripodi.
Parecía historia sentenciada, pero a los 33 minutos Baiardino, con un derechazo previo pase de cabeza del ingresado Chávez, se encargó de poner el match 2 a 1.
Con el empuje de su gente, el Tricolor jugó parte de los últimos minutos en el área de Quilmes, pero no logró convertir, pese a un disparo de larga distancia de González que se fue muy cerquita, y algún centro que encontró siempre bien parado a Saracho.
Así, sobre el cierre, el atacante Anselmo liquidó el partido con un golpe de cabeza, a la postre de un centro desde el área. 3 a 1 e historia terminada.
Nueva caída de Chacarita, alcanzó las tres consecutivas y 11 encuentros sin sumar de a tres. ¿Podrá romper el maleficio el próximo fin de semana en Victoria en el clásico ante Tigre?.