La universidad de Harvard y el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) eligió a Jerónimo Batista Bucher como uno de los 100 Líderes del Futuro a nivel mundial, por la creación de un máquina que fabrica vasos ecológicos a base de algas, que podrían reemplazar a los vasos plásticos descartables. .
Jerónimo tiene 21 años, es oriundo se Vicente López, donde vive con sus padres. Se graduó como abanderado nacional en la Escuela Técnica ORT de Belgrano, y actualmente estudia Ingeniería electrónica y Biotecnología en la Universidad de San Martín (UNSAM).
"En 10 años seguiré avanzando para generar desarrollos e iniciativas que puedan tener un impacto positivo y aportar a nuestra sociedad y al ambiente para que podamos vivir mejor" expresaba Jerónimo a una entrevista al canal de LN+.
La de Harvard y el MIT no es la primera distinción que recibe. En 2017 estuvo en Berlín como representante en la cumbre de jóvenes del G20 donde fue parte del Comité de Ambiente y Cambio Climático y dio un discruso frente a Angela Merkel, la canciller alemana.
En 2016, Bucher creó -y aún dirige- la startup "Henko", que busca generar desarrollos e iniciativas para lograr, a través de la ciencia y la tecnología, un impacto positivo a nivel social y ambiental al través de la sustentabilidad.
A través de esa iniciativa -que significa "cambio", en japonés- recibió diversas distinciones de la Cámara de Diputados de La Nación, el Ministerio de Producción de la Nación, el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable, el Honorable Concejo Deliberante de Vicente López, entre otras.
A los 18 años, Bucher creó una máquina para fabricar vasos ecológicos, que llamó "Souri", en el marco de un proyecto contra la contaminación ambiental. Fue por esta iniciativa contra la contaminación plástica que fue elegido por Harvard y el MIT como uno de los 100 Líderes del Futuro a Nivel Global.
"Les damos un excesivo consumo a los vasos de plástico, que se usan por instantes", explicaba. "Por eso, comencé a trabajar en la alternativa: máquinas que producen y dispensan vasos completamente biodegradables hechos a partir de extractos de algas que se usan, se tiran y en menos de un par de semanas se degradan totalmente".
La implementación que propone para estos vasos abarca desde cadenas de comida rápida (la mayoría ya tiene vasos de papel) hasta eventos, recitales y oficinas. "Estos vasos de plástico son uno de los productos masivos más usados a nivel global. Por eso -asegura- es importante buscar reducir su utilización, y reemplazarlo por otro que tenga la misma funcionalidad".
"La máquina no tiene un costo elevado y es algo que se vendería a la institución o empresa donde se va a utilizar y después comprarán el insumo para hacer los vasos. El equivalente de costo de un vaso biodegradable va a estar en el mismo rango de precio que los vasos de plástico", sigue.
Ese insumo es una composición a base de extractos de algas. Todo este verano estuvo dedicado en su laboratorio a mejorar esa composición. lo logró y por eso ahora está en la etapa de mejorar la automatización de las máquinas.
"Antes que la producción, es crucial obtener los fondos para el proceso de investigación. Y ese dinero más que nada fue a través de dos competencias en las que pude conseguir premios el año pasado", explica el científico argentino que el 15 de junio viajará a Boston para recibir la distinción y participar de debates en Cambridge en la llamada "milla más innovadora del mundo" (Kendall Square) junto a ganadores del Premio Nobel.