Culminando un paro de 48 horas, el Sindicato de Trabajadores Municipales de San Isidro (STMSI) realizó junto a la Federación de Sindicatos Municipales Bonaerenses (FESIMUBO) un importante acto frente al palacio municipal de San Isidro, en la avenida Centenario y Márquez. Allí, representantes nacionales, provinciales y locales del gremio municipal criticaron a la gestión de Ramón Lanús y reclamaron por "salarios dignos".
La marcha comenzó pasadas las 11 desde la sede del sindicato, en el cruce de Belgrano y Rivadavia, hacia el palacio municipal, con un fuerte apoyo de FESIMUBO, gremios de otros distritos, referentes de la CGT, que cerca del mediodía cortaron ambas manos de la avenida Centenario, en pleno centro del distrito. En la puerta de la Municipalidad, se llevó adelante un acto cuyos oradores fueron Omar Arce, secretario general del STMSI, Hernán Doval, secretario General Nacional de los Municipales (CTMRA), Rubén Cholo García, titular de la FESIMUBO y Gustavo Seva, referente histórico del STMSI y actual dirigente de la FESIMUBO, quien dio la bienvenida a las regionales de toda la provincia que se hicieron presente en el centro de San Isidro.
En el marco de un conflicto que lleva meses entre la nueva gestión encabezada por Ramón Lanús y el STMSI, y de un paro del cual no hay antecedentes similares desde 1989, Arce sostuvo que "deben cambiar el chip porque la empleada doméstica de Gasalla ya no existe". "Este Ejecutivo es muy joven para tener prácticas desleales", dijo y agregó que "desde la Ley de Convenio Colectivo de Trabajo 14.656 se acabaron los barones del conurbano". "Los votaron para que gestionen, no para que presionen. Nosotros defendemos los derechos dignos, sueldos dignos para llevar a nuestras casas. A veces son humillantes las conversaciones que tenemos", expresó.
LEER TAMBIÉN - "El paro es puramente político, promovido por el kirchnerismo", dijeron desde el municipio de San Isidro sobre la medida de los trabajadores municipales
"San Isidro es nuestro lugar, somos trabajadores municipales y contribuyentes. No nos tienen que tener miedo y nos tienen que respetar. Ojalá que cambien, que vean esto, que los trabajadores estamos unidos", sostuvo.
Arce recordó también que en San Isidro hay cerca de 7000 trabajadores municipales y que "4000 de ellos cobran menos de $300 mil en los básicos: lo que estamos negociando es dignidad". Además, indicó que el lunes están citados en el Ministerio de Trabajo de la provincia de Buenos Aires. "Ojalá se destrabe, porque esta negociación también para que estén mejor los contribuyentes de San Isidro", indicó y adelantó que si el conflicto salarial no se resuelve "la medida va a seguir" porque "la FESIMUBO no se va a callar y este es el inicio".
Por su parte, García dijo que "debe ser la primera vez en la historia que los vecinos de San Isidro ven pasar a los trabajadores municipales reclamando dignidad". "Somos los primeros en querer que al Ejecutivo le vaya bien, porque si les va bien a ellos, nos va bien a los trabajadores. Pero acá se ha invertido la cuestión: al ejecutivo le está yendo mal por inexperiencia, porque son una manga de improvisados, por eso le decimos basta a este modelo que deja afuera a los municipales", añadió.
Doval, ex diputado provincial y autor de la Ley de Convenio Colectivo de Trabajo 14.656, fue en encargado de cerrar el acto y cuestionó que "hay leyes que los intendentes creen poder optar por cumplirlas o no". "Es una contradicción en la que vivimos: un intendente que aumentó casi el 200% las tasas municipales y se hace una foto con Caputo diciendo que va a resignar los $6 por litro de nafta que cobra. Un intendente que después de aumentar un 200% las tasas no responde al aumento que reclaman las trabajadoras y los trabajadores, que no lo hacen caprichosamente".
"El intendente tiene que ir a un almacén y ver lo que aumentaron las cosas en estos nueve meses. Está pasando en toda la provincia y en todo el país", culminó Doval, quien también pidió al gobernador bonaerense Axel Kicillof que convoque al Consejo Provincial del Salario Municipal.