La Unión Tranviarios Automotor (UTA) había anunciado un paro de colectivos por 48 horas en el Área Metropolitana de Buenos Aires, en reclamo de mejoras salariales. La medida de fuerza iba a comenzar a primera hora del lunes, pero pocos minutos después del anuncio, el gobierno nacional dictó la conciliación obligatoria y desactivó el paro.
El anuncio se había dado a conocer mientras se desarrollaba la segunda reunión entre el gremios y las cámaras empresarias para llegar a un acuerdo paritario. Pero la Secretaría de Trabajo de la Nación dictó la conciliación obligatoria, lo que dejó sin efecto el paro y abrirá otra ronda de negociaciones, aún con fecha a confirmar.
En mayo, la UTA había acordado el pago de tres sumas no remunerativas mensuales de $250.000. Vencido ese acuerdo, en agosto hubo otra suma no remunerativa, de $100.000. Las negociaciones se dieron en medio de la tensión entre las empresas y el Gobierno por los subsidios y las tarifas.
Horas atrás, la Mesa Nacional de Transporte adelantó que en una asamblea que se realizará el próximo 8 de octubre podría haber un anuncio de un paro general de transporte para el 17 de octubre. Ese encuentro sindical contó con representantes de gremios del transporte de cargas, colectiveros, aeroportuarios, ferroviarios, marítimo-portuarios y taxistas. Participaron Juan Pablo Brey (Aeronavegantes); Omar Maturano y Ariel Coria (La Fraternidad); Mario Caligari (UTA); Pablo Moyano y Omar Pérez ( camioneros); Juan Carlos Schmid (Fempinra); Pablo Biró (APLA); Emiliano Gramajo (AOITA); Javier López (Seamara) y Raúl Durdos (SOMU).
"Los ejes de nuestros reclamos son tres: la falta de recomposición salarial; la libertad sindical y la defensa de la Soberanía Nacional sobre los distintos modos de transporte. La Mesa se pronunció por la recuperación del salario de los gremios del transporte que perdieron en forma general el poder adquisitivo desde que asumió Milei", explicó Juan Carlos Schmid, del sindicato de dragado y balizamiento.