Tigre empató con Central Córboba un partido que comenzó ganando desde el arranque, pero no pudo mantener la ventaja. Los visitantes lo igualaron en el segundo tiempo y el Matador no pudo volver a ponerse en ventaja.
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Con solo un cambio respecto al triunfo ante Argentinos (el ingreso de Monzón), Tigre se puso en ventaja desde el vestuario con un auténtico golazo: centro de rabona de Monzón y cabezazo de Galván abajo del arco. Delirio en Victoria al abrir muy temprano un partido que podía presentarse complejo.
Tigre aprovechó el ímpetu y empezó a asediar al visitante. Muchas pelotas al espacio para las corridas de Armoa y Monzón, que estaba endiablado, le empezaron a generar un gran dolor de cabeza al Ferroviario. Después el partido se planchó y se prestaron la pelota, promediando el primer tiempo.
En el tramo final, el Matador se despertó y volvió con todo a buscar el segundo, sin tanta circulación de pelota y con ataques más directos. Un remate de Monzón que sacó Ingolotti fue la más clara. Faltó más participación de Maroni en la generación, pero Tigre redondeó una correcta primera parte y se fue al descanso en ventaja.
Llamativamente, Tigre le cedió la pelota a Central Córdoba en el segundo tiempo y durante 20 minutos el trámite lo manejó el visitante, tratando de ser profundo con Angulo por izquierda. No inquietaba a Zenobio, pero al Matador le quedaba muy lejos el arco de Ingolotti. A los 20, Domínguez mandó a González a la cancha por Maroni para darle mas contención al mediocampo.
De tanto refugiarse, Central Córdoba llegó al gol a los 31 minutos. Guapeada de Angulo y el colombiano de arremetida marcó el empate. Domínguez tardó demasiado en hacer los cambios cuando al equipo ya se lo notaba cansado y los metió todos después de la igualdad: Contin, Sarmiento y Miranda a la cancha para los últimos 15'.
Para colmo, a los 37' Leizza cortó a Angulo en la puerta del área, vio la roja y dejó a Tigre con uno menos para el tramo final. Nardelli a la cancha por Galván para rearmar la línea de fondo y resistir.
Central Córdoba también se quedó con uno menos en la jugada más polémica de la noche: Sarmiento se iba solo con la pelota y el juez Ramírez frenó todo para expulsar a Abascia. El VAR lo llamó para revisar pero el árbitro mantuvo su fallo.
En los escasos seis minutos de descuento, el Matador tomó una postura defensiva (sin quererlo, pero Central Córdoba lo arrinconó) y no pasó del empate.
En la próxima fecha recibirá a Deportivo Riestra en condición de local.
