Tigre jugó un partido muy discreto en el Sur, falló en momentos claves y no pudo con Quilmes. Empezó perdiendo con el gol de Bonetto en el arranque, lo empató gracias a Menossi en el comienzo del segundo tiempo y lo perdió faltando 10 minutos con el tanto de Pier Barrios. Así, el Matador no pudo subirse a la punta de la Zona A de la Primera Nacional.
Seguramente Diego Martínez querrá olvidar rápidamente lo que ocurrió en la primera parte. Si bien Tigre manejó la pelota los primeros minutos y se aproximó al area contraria, a los 18' llegó el baldazo de agua fría. Después de una serie de rebotes en el área y un despeje de Blondel que quedó corto a media altura, Julián Bonetto cabeceó en el punto penal y puso el 1-0 para Quilmes.
A partir de ahí, el Matador se fue del partido. Se desordenó en el fondo, se tornó muy errático en los metros finales (Fernández malogró dos chances prometedoras de gol) y empezó a caer en el juego friccionado que propuso el Cervecero, a tal punto de que a pocos minutos de finalizar el primer tiempo, se produjo un tumulto por una falta de Prédiger que terminó con el capitán y Milton Céliz amonestados y un miembro del cuerpo técnico expulsado.
El complemento arrancó mejor para Tigre: a los 6 minutos Rodrigo Moreira se ganó otra tarjeta amarilla y como ya estaba amonestado, dejó a su equipo con 10. El Matador cambió la postura, se adelantó unos pocos metros y tuvo una chance inmejorable minutos después en los pies de Magnín, a quien le cayó la pelota en el área chica y de volea la mandó a la tribuna. A los 16', cuando cierta impaciencia empezaba a sentirse en la cancha, llegó el empate que se gritó muchisimo. Otra pelota que quedó boyando fuera del área, Menossi sacudió con derecha como vino y la colgó de un ángulo.
Después de la igualdad, el partido fue todo del conjunto de Victoria. Manejó la pelota y buscó asociarse rápido en 3/4 para encontrar los huecos en la defensa de Quilmes. Un gran desgaste físico que no pudo traducirse en el marcador. Con el hombre de menos, el local se dedicó a defender y a sacar la pelota de su área pero a los 35' se encontró nuevamente con la ventaja, algo inmerecida. De un tiro libre aislado que pasó por toda el área, Alarcón despejó de cabeza para el medio y Pier Barrios la agarró de volea para poner el 2-1.
A partir de ahí, Quilmes, como se duele decir "durmió" el partido. Tigre quedó aturdido, erró demasiados goles (sobre el final Flores también se lo perdió abajo del arco) y se le escapó de las manos un partido que, por lo hecho en el segundo tiempo, parecía que terminaría con un final feliz. De esta manera, los dirigidos por Diego Martínez no pudieron subirse a la punta y quedaron a tres puntos de Almirante Brown. En la próxima fecha quedará libre y deberá esperar que Riestra le saque puntos a la Fragata.
¿QUERÉS RECIBIR LAS NOTICIAS DEL MATADOR POR WHATSAPP? - Acá dice cómo (no es grupo)