Los martes y jueves en el Campo Municipal Nº 2 de Boulogne, ubicado en Gurruchaga 2020, se llevan a cabo las clases de fútbol para adultos.
En los entrenamientos, los alumnos realizan ejercicios de precalentamiento corporal, abdominales, intervalos aeróbicos, sentadillas básicas, entre otros movimientos. Luego se dividen en dos equipos y empieza el juego para pasar un rato divertido y saludable al aire libre.
“Fútbol para adultos es una actividad que le permite estar en movimiento a los vecinos, jóvenes y adultos. Buscamos incluir a la gente mayor, arriba de los 50, queremos que estén bien físicamente y que se diviertan. Es muy necesario que se sientan cómodos”, explica Cristian Ferrante, Jefe de Campo 2.
Durante la actividad, que funciona de 18 a 19.50 horas y a la que asisten jóvenes mayores de 18 años, se realizan distintos ejercicios con movimientos variados, que tienen como objetivo el desarrollo de todas las capacidades físicas. Son entrenamientos dinámicos, creativos y entretenidos, que trabajan la fuerza, potencia, velocidad, coordinación, precisión, resistencia muscular, equilibrio y agilidad.
Maximiliano Maldonado, profesor a cargo de la clase aseguró: “Se hace hincapié en lo recreativo, ya que buscamos movimientos que colaboran al entrenamiento lúdico. En una época en la que el sedentarismo está haciendo estragos, buscamos que jóvenes y adultos estén activos y cuidados. Por eso promovemos una actividad divertida, motivadora, que alienta la creación de vínculos sociales”.
Antes de comenzar el partido de fútbol, Oscar Pedro Escalante de Boulogne, comenta: “Hace varios años vengo a la actividad y me siento muy cómodo. Esta bueno esto de mezclar jóvenes con adultos. Pasamos un lindo momento, nos divertimos y sobre todo nos ponemos bien físicamente”.
Al ingresar a cada predio, se toma la temperatura y se sanitizan las manos con alcohol en gel. Es obligatorio el uso de tapabocas, salvo al momento de practicar el deporte. Además, se desinfectan los elementos.
“Todos venimos con barbijos, calentamos separados y luego cuando arranca la actividad fuerte nos sacamos el barbijo. El municipio constantemente nos cuida y nos ofrece todo tipo de actividades, nos ayuda a salir del día a día¨, concluye Cristian Medina, vecino de San Isidro.