Viviana Fein, la fiscal a cargo de la causa por la muerte de Alberto Nisman, dio a conocer los resultados preliminares de la autopsia y reveló que el fiscal se suicidó. No obstante, puso reparos al aclarar que las conclusiones de la prueba que verifica si la víctima tenía restos de pólvora en su mano aún no están.
Fein dijo que el decano de la morgue judicial le comunicó a la representante del Ministerio Público que "en la muerte de Nisman no hubo intervención de terceras personas".
Señaló, además, entre hoy y mañana, llegarán los resultados del estudio microscópico de barrido electrónico practicado sobre las muestras tomadas de las manos del fiscal Nisman. Con este resultado, se determinará la existencia o no de restos residuales de pólvora para confirmar si fue él quien se disparó el tiro en la sien.
Según se supo ninguna de las dos cerraduras del departamento donde vivía Nisman está forzada. La puerta principal estaba cerrada sin la llave puesta, y la de servicio con llave puesta del lado de adentro.
Fuente judiciales confiaron a este portal que no había nada revuelto en el inmueble y que los investigadores secuestraron todas las cámaras seguridad y se llevaron el registro entradas y salidas.
En las próximas horas, la Fiscalía continuará tomando declaraciones testimoniales y quedará a la espera de los resultados de distintas medidas técnicas encomendadas a la Prefectura y a la división Apoyo Tecnológico de la Policía Federal sobre el material secuestrado en el departamento de Nisman, destinado a "poder descartar cualquier otra hipótesis", dijo Fein.
En cuanto a la bala que provocó la muerte de Nisman, los peritajes balísticos realizados por expertos de la Policía Federal determinaron que fue disparada "en un 99 por ciento" por la pistola calibre 22 largo marca Bersa hallada junto al cadáver.
"El plomo que extrajeron los forenses de la cabeza de Nisman durante la autopsia se corresponde en un noventa y nueve por ciento al arma secuestrada en la escena del hecho", dijo a la agencia Télam una fuente de la investigación.
Para llegar a esta conclusión, los peritos utilizaron un microscopio que se usa en balística para cotejar la impronta que deja la aguja percutora sobre el casquillo, con la intención de determinar si fue disparado por una misma arma de fuego.
En tanto, los forenses extrajeron durante la autopsia al cuerpo del fiscal el plomo que había quedado alojado en la cabeza y lo remitieron el cuerpo de expertos en balística. Tras un análisis, los peritos determinaron que "en un noventa y nueve por ciento" se corresponde con el arma secuestrada.
Por otra parte, la Justicia aguardaba un informe del Registro Nacional de Armas (Renar) sobre la titularidad de la pistola calibre 22 largo marca Bersa.
En principio, el Renar informó que Nisman tenía dos armas registradas a su nombre, pero la fiscal Fein aguarda para las próximas horas una ampliación del informe, ya que no pudo confirmar si el arma hallada en el lugar es una de ellas.
Es que una línea investigativa apunta a que Nisman le había pedido a un empleado de la fiscalía amigo que le prestara un arma de fuego por "cuestiones de seguridad". Por tal motivo, la fiscal llamó a declarar a ese testigo, a quien confirmó que el domingo a la mañana se dirigió al departamento del fiscal para dejarle el revólver. Según se supo, esa persona quedó registrada en el ingreso al edificio Le Parc, en Puerto Madero, donde vivía Nisman.
Por otra parte, expertos en comunicaciones de la Policía Federal analizaban el teléfono celular del fiscal fallecido para intentar establecer las últimas comunicaciones realizadas y recibidas antes de morir. Además, pretenden reconstruir los intercambios de mensajes de texto que realizó en los últimos días, dijeron las fuentes policiales.
Los peritos en rastros trabajaron durante las últimas horas en el levantamiento de huellas del Audi que pertenecía a Nisman y que fue hallado estacionado en el primer subsuelo del edificio Le Parc de Puerto Madero. Aún no se estableció la data de la muerte.
Fuente: Minuto1