Carlos Casares no fue el lugar en el que Chacarita rompió la racha, sino en el que la estiró. El Tricolor cayó por 1 a 0 frente a Agropecuario de aquella ciudad, con gol de Urquijo en el tramo final del encuentro, y alcanzó la alarmante cifra de diez partidos sin conocer la victoria. Su próximo compromiso será en San Martín ante Quilmes.
Más voluntad que buen juego, así resultó el desarrollo de la primera etapa, en la primó más la impresión que el fútbol asociado y, por ende, las llegadas al arco rival. Agropecuario era quien más insinuaba y parecía estar más cerca de Tripodi, pero carecía de profundidad. Chaca, por su parte, poco y nada.
Una de las escasas situaciones para contabilizar que dejó el primer tiempo sucedió a los 13 minutos y fue para el conjunto local, tras un cabezazo muy desviado del atacante Dening, previa trepada y centro de Blando, por el andarivel izquierdo de la defensa del Funebrero ocupado por Chávez.
Por el mismo sector, a los 34', esta vez fue Ríos que escaló y sacó un buen centro que Blando, estancado desde el punto penal, capturó y de volea le dio de lleno a la pelota que pasó muy cerca del palo izquierdo del estático Tripodi.
Así se esfumaron los primeros 45 minutos, en los que el cuadro dirigido por Arias, más allá del sacrificio de Baiardino y de los intentos (fallidos) de Nieto al hacerse dueño del balón, no logró hilvanar esas sociedades que le permitan dañar al arco defendido por Sand.
Para el complemento, Agropecuario decididamente se dedicó a jugar con sus líneas más adelantadas en el campo y así vulnerar a la frágil defensa de Chacarita, ya sin Manchot en cancha, que debió ser remplazado por Ledesma en el entretiempo debido a un fuerte golpe que recibió en la zona del tobillo al cabo del primer tiempo.
El conjunto de Carlos Casares tuvo la primera opción de gol a los 3 minutos del complemento a través de Dening, quien se llevó el balón sobre el lado izquierdo y sacó un centro/remate al arco que Tripodi se encargó de desviar. Minutos más tarde, el mismo delantero, a la postre de un yerro de Ledesma, recibió una asistencia que lo dejó solo frente al arco y, milagrosamente, al rematar, la pelota se fue pegada al palo.
Con el partido ya cuesta arriba, Arias movió el banco y realizó una (curiosa) variante táctica: mandó a la cancha a Bonansea (delantero) en lugar de Tallarico (defensor), de buen papel hasta el momento tratando de contrarrestar los avances de los atacantes del Sojero.
Cualquier modificación, fuese o no táctica, no equilibró el encuentro en favor de Chacarita. El local siguió atacando y, al final, tuvo su premio. A los 35 minutos, Montero trabó con Chávez, ganó, corrió hasta el fondo y despachó un centro que Dening bajó, dejándole la pelota servida al recién ingresado Urquijo, que de primera remató y mandó el balón al fondo de la red, decretando el merecido 1 a 0.
Sólo hubo tiempo para más cambios por parte de Arias que no variaron el desenlace del partido y para los truncos avances del Funebrero, que consumó otra caída, la segunda consecutiva, y la alarmante cifra de diez partidos sin conocer un triunfo. Su próximo compromiso será el próximo domingo frente a Quilmes en San Martín, con la presencia de su gente, que exige una victoria, algo que hace mucho tiempo se acostumbró a no ver.
