Tigre no aprovechó el envión que podía suponer la victoria agónica frente a Banfield e igualó sin goles ante Instituto en un partido que por momentos fue inmirable. De esta manera, acumula tres encuentros sin anotar en condición de local. Tras el cotejo, Sebastián Domínguez habló en conferencia de prensa y analizó lo sucedido.
"Fue un partido parejo, pero dentro de ese partido parejo, a los 15' del segundo tiempo tendríamos que haber estado ganando 2 a 0. Tuvimos dos situaciones completamente claras. También sobre el final lo pudimos perder, estos partidos son así", inició en su análisis.
"Siempre estuvimos en esa sensación de que podríamos haber hecho un gol pero no podemos destrabarlo de local. Los jugadores se ponen nerviosos, tienen calambres por la ansiedad, fue la cuenta pendiente en nuestro proceso hasta acá", añadió el entrenador, consciente de que al equipo le costó mucho en el José Dellagiovanna, lo que en otros momentos era una virtud o una ventaja por sobre el rival.
Respecto al plan original de partido, analizó: "El equipo intenta jugar bien, asumir la responsabilidad, pero tenemos muchos errores técnicos que hacen que la posesión sea lenta. Buscamos jugar siempre al lado opuesto, era pelota de un lateral a un volante central e inmediatamente jugar al otro lado, pero no lo pudimos hacer con calidad".
Por último, Domínguez puntualizó en el ingreso y posterior salida de Darío Sarmiento y también en Camilo Viganoni, quien sumó minutos tras varias fechas: "Darío salió por un golpe en el gemelo. Tuvo una semana excelente y hablamos mucho de la confianza, que confíe en sus condiciones. Había tenido un golpe en la práctica en los últimos entrenamientos y creo que en esa zona lo lastiman en el partido. Camilo estaba en su mejor momento físico cuando se lesionó en Reserva. Confiamos en él, lo vamos llevando de a poco. Lo hizo bien, en momentos estuvo muy solo, pero hay que ponerlo en situaciones claras dentro del área".
